Ya no cogemos,
Es lo primero que me dicen muchas parejas al llegar a consultoría conmigo.
Y casi siempre empieza igual: Uno de los dos o los dos trabajan de sol a sol, llegan rendidos, cenan algo rápido, ven el celular, se acuestan, y al otro día se repite exactamente lo mismo.
El cuerpo sobrevive, pero el deseo… se apaga.